Joyas especiales de otoño-invierno 2021/2022
Escrito por Radio Zero FM el 20 mayo, 2021
El auge de las joyas especiales y un poco grandilocuentes es la crónica de un éxito anunciado: ha sucedido poco a poco pero con una contundencia ineludible, de modo que a poco que se ojeen las tendencias, esto no será ninguna sorpresa. Sí, las de corte minimalista tuvieron años dorados gracias a la necesidad estética de la generación millennial, pero el devenir de los años y el aumento del uso de las pantallas han hecho que las piezas aumenten de tamaño y adquieran formas variopintas. Esas medidas XL es uno de los hilos conductores de muchas de las joyas de otoño-invierno 2021/2022 vistas en pasarelas.
Los ‘chokers’ y pendientes de Saint Laurent
En la nueva de colección de Saint Laurent por Anthony Vaccarello hay muchas lecturas que realizar y muchas texturas que aprehender, y en esa cualidad visual de lo táctil juegan un papel fundamental las joyas que remataban gran parte de los looks. Lejos de resultar planas, los chokers y pendientes XL que se han convertido en protagonistas están cuajados de cristal, esmaltes, eslabones y todo tipo de aderezos que transforman sus líneas en una sucesión de accidentes geográficos que piden ser tocados. No deberían perderse de vista los collares cortos con flores ni los pendientes largos hechos por y para la fiesta, aunque cualquier pieza podría aparecer en esta lista.
El broche de Gucci
Al igual que en el caso anterior, la apuesta de Alessandro Michele para el desfile que celebra el centenario de Gucci fue una concatenación de looks sorprendentes con joyas sorprendentes. Tanto es así, que muchas de las piezas pertenecían a la nueva colección de Alta Joyería de la casa, siendo la primera vez que este tipo de joyas aparecían en un desfile de la firma. Sigue resultando complicado escoger solo una, pero un broche como este es ineludible: consigue maridar la tendencia floral con la logomanía.
Las pulseras de Loewe
La propuesta de Jonathan Anderson para Loewe fue audaz y disruptiva con respecto a la narrativa que el diseñador había seguido en la casa hasta el momento, y también lo fueron los accesorios que la remataban. Así, los brazaletes gigantescos que combinan distintos materiales (incluso textiles) adquieren todo el sentido del mundo. Y sí, también son aptos para videollamadas: atrapar la mirada, la atrapan.
Los pendientes de cuentas con forma de flor de Simone Rocha
La adolescencia y cierta inspiración college fueron algunas de las coordenadas que dominaron la colección de otoño de Simone Rocha, con lo cual no es extraño ver que detalles alineados con esa estética se adueñaban de los diseños. Con permiso de las perlas, los pendientes de cuentas con forma de flor son algo que no se puede dejar de mirar: encapsulan la delicadeza, lo naíf y hasta un poco de verano (¿y quién no quiere estirarlo un poco cuando llega el frío?).
El collar cascada de perlas de Jil Sander
Cuando parecía que ya estaba todo visto en materia de collares de perlas, llega la versión de Jil Sander para demostrar que incluso los clásicos pueden seguir reinventándose hasta el infinito. En vez de una sarta más o menos pegada al cuello, la firma se ha decantado por un collar cascada que actúa a modo de top en el estilismo y garantiza elevar cualquier tipo de prenda.
Los anillos con forma de muela de Schiaparelli
De nuevo, cualquiera de las joyas de Schiaparelli podría estar aquí: la marca ha hecho de las joyas figurativas uno de sus ejes estéticos centrales, pudiendo encontrar multitud de piezas con forma humana. Si bien labios y ojos pueden resultar más evidentes, otros perfiles como los dientes son más inesperados.
Fuente: Vogue